La chilena hizo el anuncio en su Instagram. Según contó Mon Laferte, hace un año pensó en lo increíble que quería ser parte de un musical.
Mon Laferte suma y sigue. La chilena radicada hace varios años en México, acaba de hacer un anuncio que la tiene muy ilusionada. Porque tal como ella misma lo contó en su cuenta de Instagram el martes de la semana en curso, podrá cumplir un deseo que proyectó el 2024.
«Hace un año mientras estaba de gira por Europa, vi la obra de Cabaret en Londres y pensé que sería increíble algún día hacer teatro y especialmente ser Sally Bowles», comenzó diciendo en su cuenta en la red social de Meta.
Y a renglón seguido, Mon Laferte dio a conocer la buena nueva. «Las vueltas que da la vida, un año después, puedo por fin darles la hermosa noticia, seré Sally! en el emblemático @teatroinsurgentes», aseguró el crédito nacional que con esta incursión en el teatro, suma un nuevo desafío a su ya diversificada carrera, que le ha permitido a su público disfrutar de su trabajo como cantante y también como artista visual. A lo que se adiciona este desafío.
«Me sumaré a esta hermosa obra que ya lleva un año en cartelera, es un total honor para mí, gracias a todo el equipo por confiar, me siento un poco intrusa en el teatro, pero les prometo que lo estoy dando todo, espero estar a la altura de tan maravillosa producción ¡Nos vemos en julio cariño!», aseguró en su cuenta en la red social mencionada.
En total, Mon Laferte hizo dos publicaciones alusivas al montaje que se estrena el mes próximo, una consistente en un registro audiovisual de carácter promocional, donde se le ve intérpretando a Sally Bowles, además de un set de imágenes posadas con la estética de este personaje.
Tras dar a conocer esta noticia, la chilena empezó a sumar felicitaciones y comentarios relevando su estreno en este tipo de espectáculos, que la exhibirán desde un lugar anteriormente no explorado, aunque con toda la expectativa de que, una vez más, destacará como ya lo ha hecho junto a su laureada carrera como cantante.
Además de lo que Mon Laferte ya empezó a mostrar desde su faceta como artista visual, que también ha desplegado en Chile. En lugares como Santiago, deonde ha expuesto en el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM), además de su natal Valparaíso. Y cada vez que lo ha hecho, ha llamado la atención por su versatilidad y lo talentosa que ha evidenciado ser en más de una disciplina.
Mon Laferte: «Espero estar a la altura»
Y en paralelo a su anuncio, la chilena ofreció una conferencia de prensa donde se refirió a su feliz y esperada incursión en este proyecto.
«Espero estar a la altura de esta obra que me parece magnífica, la vi y me enamoré, y pensé que sería hermoso si algún día pudiera hacer algo así… las vueltas de la vida, aquí estoy», reconoció Mon Laferte durante su encuentro con los medios.
Siguiendo con sus declaraciones, se refirió a lo desafiante que ha sido para ella el montaje que protagoniza. «Hay millones de retos, desde el baile hasta construir el personaje, porque es un viaje, pero también adaptarme a otro tipo de vestuario que es el de teatro. Me cuesta porque es diferente, yo estoy acostumbrada a ser la que dirige en mi proyecto, pero estoy aprendiendo y trato de escuchar», sinceró la artista en medio de su orgullo de ponerse en la piel de Sally.
De hecho, contó que a Bowles la une el sueño que ambas tenían de convertirse en estrellas. «Me parezco bastante a Sally, pero no ahora, sino cuando era más joven. Afortunadamente he madurado, pero sí hay mucho de Sally en mí: esta chica buscando ser una estrella y siendo un poco alocada, sintiéndose incomprendida…», admitió Mon.
«Yo me he sentido así, sobre todo cuando era más jovencita», recordó en declaraciones que recoge Emol.
El musical que protagoniza Mon Laferte
Cabaret es un emblemático musical ambientado en el Berlín de los años 30, en plena decadencia de la República de Weimar, que tiene como telón de fondo el ascenso del nazismo.
Respecto de su argumento, que en su versión mexicana tiene a nuestra Mon Laferte como protagonista, la historia transcurre en torno al Kit Kat Klub, un local nocturno donde la extravagancia, la libertad y el desenfreno contrastan con la inestabilidad política y social del momento.
Y en el centro de la trama se encuentra Sally, una joven cantante británica, carismática y enigmática, que simboliza la lucha entre la ilusión personal y la crudeza de la realidad. Ella, con su actitud desafiante y su espíritu bohemio, encarna los deseos de libertad y autoexpresión, pero también la fragilidad de quienes intentan ignorar lo que sucede más allá del escenario.
Con aproximadamente 19 o 20 años en la obra original, de acuerdo al relato semiautobiográfico de Christopher Isherwood, «Adiós a Berlín» (1939), en el que se basa Cabaret, ella busca tener una vida en base a sus anhelos. En esta versión literaria, la original, Sally es descrita como una joven inglesa aspirante a actriz y cantante, con una personalidad encantadora, algo ingenua y muy impulsiva.
El gran deseo del personaje de Mon Laferte, en consecuencia, es vivir intensamente, ser amada y alcanzar el estrellato, sin tener que renunciar a su libertad ni enfrentar las duras realidades del mundo que la rodea.
En el fondo, Sally sueña con ser una gran estrella, una artista admirada, glamorosa y libre. Sin embargo, este deseo está teñido de una fuerte necesidad de evasión: quiere mantenerse dentro de la burbuja del cabaret, donde todo parece posible, y evita mirar de frente la inestabilidad emocional, económica y política que la rodea. Prefiere el brillo y la ilusión del presente a cualquier compromiso duradero o sacrificio por un futuro más estable.
Este conflicto —entre el deseo de libertad y la negación de la realidad— es lo que la convierte en un personaje tan fascinante y trágico: su anhelo es tan legítimo como imposible de sostener en el contexto histórico del Berlín previo al nazismo.
Una problemática que en 1972 fue llevada a la pantalla grande en una versión cinematográfica de Cabaret bajo la dirección de Bob Fosse, con una recordada interpretación de Liza Minelli en el rol de Sally, responsabilidad que desde julio, recaerá en Mon Laferte.
Crédito imágenes: @monlaferte
